Actividades de SIPAZ (De mediados de mayo a mediados de agosto de 2024)
31/08/2024El Servicio Internacional para la Paz (SIPAZ) lamenta el asesinato del Padre Marcelo Pérez Pérez ocurrido este 20 de octubre en San Cristóbal de Las Casas. Desconocidos en una moto le dispararon en cuatro ocasiones, según versiones preliminares, ello mientras se dirigía al templo de Guadalupe, después de oficiar misa en el barrio de Cuxtitali en esta misma ciudad.
Como SIPAZ, coincidimos en múltiples ocasiones con el Padre Marcelo en los últimos años, ello debido a su trabajo clave en la defensa de los derechos humanos, la tierra y el territorio y a su acompañamiento pastoral en procesos de paz y reconciliación.
Indígena tsotsil originario de San Andrés Larrainzar, fue ordenado en 2002. Desde varias parroquias y como vicario de pastoral social de la diócesis de San Cristóbal de Las Casas, fue innegable su compromiso con los más vulnerables.
En 2014, la parroquia de Simojovel de la que el Padre Marcelo era párroco, empezó a denunciar el aumento de la venta de droga y de la presencia de grupos criminales, lo que lo llevó a recibir amenazas de muerte. Por lo mismo, a partir del 2015, empezó a recibir medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que seguían vigentes a la fecha.
En 2021, ante lo que venía pasando en Pantelhó después de que el grupo de autodefensas de Los Machetes saliera a la luz pública, el Padre Marcelo Pérez, con el aval de la Diócesis de San Cristóbal, fue parte de una comisión de intermediación. El 19 de julio de 2021 se dio la detención y posterior desaparición de 19 personas acusadas de ser parte del grupo “Los Herrera”. Familiares de los desaparecidos acusaron al Padre Marcelo de la desaparición de estas personas, por lo que la Fiscalía de Chiapas giró una orden de aprehensión en su contra. Recrudecieron las amenazas de muerte.
Ante ello, la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas decidió trasladarlo a la ciudad de San Cristóbal, donde en los últimos 2 años estuvo a cargo de la parroquia de Guadalupe.
Apenas el 13 de septiembre pasado, en el marco de la peregrinación por la paz que se llevó a cabo en Tuxtla Gutiérrez con la participación de las tres diócesis de Chiapas, declaró ante medios que “Chiapas es un polvorín”.
Su asesinato, terrible en sí, es además una ilustración más de lo violento que se ha tornado el contexto en el estado.
Llamamos a las autoridades correspondientes a que se lleve a cabo una investigación exhaustiva, a que se identifique y se castigue a los responsables, y a se implementen medidas efectivas para garantizar la seguridad y la vida de quienes luchan por la justicia y la paz.
SIPAZ – Servicio Internacional por la Paz