P or 22 años, Jennifer Haza Gutiérrez formó parte de la organización de defensa de los derechos de la niñez, Melel Xojobal A. C., basada en San Cristóbal de las Casas, Chiapas. En diciembre pasado, dejó su puesto de directora. En una entrevista nos compartió sus experiencias, aprendizajes y esperanzas.

Participación de niñas en la marcha del 25N, San Cristóbal de Las Casas © SIPAZ

Presentación:

Jennifer es originaria de la Ciudad de México, licenciada en Ciencias de la Comunicación y cuenta con diplomas en Derechos de la Infancia y Litigio Estratégico frente al Sistema Interamericano de Derechos Humanos, en Participación Educativa con Poblaciones Callejeras y en Educación Intercultural Bilingüe.

En 2002, llegó a Melel Xojobal A. C. para realizar su servicio social en el área de acompañamiento de niñ@s trabajadores en las calles. Después de haber trabajado en diferentes proyectos, asumió el puesto de Coordinación General durante cinco años y, en 2013, el de Dirección. Durante su tiempo en la organización, ha realizado trabajos educativos en espacios públicos y escuelas, así como labores de incidencia y defensoría, entre otros. Se identifica como feminista y defensora de derechos humanos.

Fortaleciendo las infancias desde un lugar de dignidad y esperanza

“Yo no conozco otra organización en México que explícitamente reivindique el derecho a trabajar de los niñ@s en condiciones dignas y seguras”, nos comparte Jennifer en referencia al trabajo de Melel Xojobal, que se enfoca en defender los derechos de l@s niñ@s trabajadores, sobre todo de origen indígena. Según la organización, es una forma de ingreso a veces imprescindible, con la cuál pueden apoyar a sus familias, que a menudo tienen dificultades para cubrir gastos básicos. Además, Melel Xojobal considera que “hay formas de trabajo digno, que enriquecen y fortalecen el desarrollo de capacidades y habilidades de niñas y niños y adolescentes.”

Evento para el cambio de dirección en Melel Xojobal, agosto de 2024 © SIPAZ

Sobre la situación actual de la niñez, Jennifer nos comunicó: “Yo creo que cada vez l@s niñ@s y adolescentes tienen circunstancias en contra para poder disfrutar de sus derechos en Chiapas y particularmente las infancias de los pueblos indígenas. (…) Las violencias han incrementado en termino de frecuencias, pero también en termino de crueldad contra l@s niñ@s. Se manifiestan a veces de formas a veces no tan evidentes, como en lo digital, discriminaciones o explotaciones cotidianas, no sólo de los niñ@s si no de las familias. Desde mi perspectiva la realidad cada vez va a ser más difícil para las infancias.“

Ante este contexto, el trabajo de Melel Xojobal tiene como objetivo fortalecer las infancias frente a las violencias para que puedan crecer en un espacio de dignidad y esperanza y, desde ahí, poder encontrar su lugar en el mundo. “Hay una apuesta política junto con l@s niñ@s. No es que la organización viene a brindar respuestas, pretendiendo transformar la realidad. Lo que se hace, lo hacemos junto con ell@s”. Otro aspecto importante es la incidencia en la opinión pública, buscando hacer entender que l@s niñ@s tienen los mismos derechos que los adultos y que tienen derecho a gozarlos. “Lo que pasa en el mundo, no lo podemos dividir entre lo que pasa a l@s niñ@s y lo que pasa a l@s adult@s”, expresó.

La voz de las infancias

Marcha contra la violencia y la desigualdad hacia las niñas y mujeres adolescentes en San Cristóbal de las Casas, octubre de 2024 © SIPAZ

Para Jennifer, ha sido importante acompañar a l@s niñ@s para poder comprender los contextos complejos. No sólo le permitió entender que “para aprender se necesita disposición para escuchar y observar”, sino también que el lugar donde nacemos y nuestros orígenes marcan formas distintas de ser niñ@s. Considera clave reconocer la diversidad de infancias. En este sentido, el trabajo de Melel ayuda a l@s nin@s a entender que no están destinados a ser víctimas de injusticias, discriminaciones y violencia, y que su situación económica o el hecho que “siempre ha sido así” no son razones que justifiquen estas realidades. Según Jennifer, es importante que l@s nin@s sepan que tienen derecho a usar sus voces para denunciar violaciones contra sus derechos.

Jennifer también nos habló de las acciones públicas, como las marchas, así como de los procesos y los espacios dirigidos a niñas y mujeres adolescentes. Le impactaron, porque le parecen importantes y poderosos para la transformación, no sólo de las niñas, sino también de las mujeres y los hombres de las comunidades.

“No estaban estos espacios para hablar sobre las violencias contra las mujeres (…) De salir a las marchas y tomar el espacio público, hablar ante los medios y tomar el micrófono. Esta energía me parece muy contagiosa y poderosa”, nos dijo.

Melel Xojobal- Luz Verdadera

En respuesta a la pregunta porque Melel Xojobal lleva su nombre, Jennifer nos contestó: “Quienes fundaron Melel decidieron ponerle Luz Verdadera en tzotzil por la Luz de los ojos de l@s niñ@s. Porque la mirada de los niños es lo que aporta luz para el camino”.

En este sentido, también nos compartió lo que a ella le inspira y le da confianza y esperanza para un futuro mejor: “Como decía, se va a poner peor y se seguirá poniendo más difícil la realidad, pero seguimos viendo a muchas personas que persistimos en que es importante seguir acompañándonos, en pensar en otros presentes y futuros y construir lo posible en lo cotidiano. Desde l@s niñ@s, algo que también veía con más claridad (…) es que, frente a los momentos de crisis (…), pues l@s niñ@s son l@s primer@s en expresar su solidaridad o en preocuparse por cómo van a estar l@s otr@s, cómo va a estar su hermano, cómo está su mamá, quién les va a cuidar. Entonces, creo que esa expresión de solidaridad es un componente que no sé si nos va a salvar, pero es lo que nos va a mantener persistiendo en lo que es posible, en ir construyendo esperanza y grietas desde donde se pueda mirar la justicia, la dignidad y la felicidad de las personas. Ahí puede haber también esta luz verdadera, en estas pequeñas grietas que se van abriendo y que l@s propi@s niñ@s van abriendo. Nosotr@s acompañamos, y también es una convicción de que, al hacerlo junto con ell@s, también nos transformamos en ese proceso. Entonces, esas grietas de justicia, de libertad y de dignidad son de todas y todos y para todas y todos”.