El Acuerdo Regional sobre el Acceso a la Información, la Participación Pública y el Acceso a la Justicia en Asuntos Ambientales en América Latina y el Caribe (mejor conocido como Acuerdo de Escazú por haber sido adoptado en la ciudad costarricense de ese nombre), es un instrumento jurídico pionero en materia de protección ambiental, y al mismo tiempo un tratado de derechos humanos que propone una transformación de la gobernanza ambiental.